miércoles, 28 de abril de 2010


¿Podemos subir ésta montaña? No lo sé. Más alto que nunca. Sé que no podremos con ello si nos lo tomamos con calma. Hagámoslo fácil. Fácil, fíjate.

Quemando el horizonte de ésta autopista,
tras la espalda de un huracán que ha empezado a dar la vuelta.
Cuando éramos jóvenes.
Cuando éramos jóvenes.

Y a veces, cierras tus ojos,
y ves el lugar donde solías vivir,
cuando eras jóven.

Dicen que el agua del diablo no es tan dulce.
No tienes porqué bebértela ahora.
Pero puedes mojar tus pies en ella
cuando quieras.

No hay comentarios: